Descripción
En este trabajo se analizan las representaciones sociales asociadas a la gestión del agua en el reasentamiento Nuevo Veracruz (también conocido por el nombre de Montea) ubicado en el Departamento del Huila (Colombia). Los habitantes de este reasentamiento fueron desplazados por la construcción del Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo, el cual inundó sus tierras para la construcción del embalse.
La investigación se sustenta en el estudio de caso, en el análisis de variables cualitativas y en la definición de recomendaciones para mejorar la gestión del agua, a partir de un ejercicio de prospectiva estructural.
Con la reconfiguración del territorio hidrosocial se analizan los tres procesos de cambio que redefinen el territorio de forma integral y sistémica y contemplando los impactos físicos-ambientales, político administrativos y sociales.
Se encuentra que los tres tipos de actores entrevistados (territoriales, académicos/ONG, institucionales), los que tienen más poder son los actores institucionales, y son estos mismos actores los que tienen representaciones sociales propias del antropocentrismo utilitario (ideas de superioridad y justificación de dominio y apropiación de la naturaleza).
De la caracterización de las representaciones sociales también fue posible identificar que la pesca, el acceso al río y la relación con el agua, son los temas priorizados por la población de Nuevo Veracruz, lo cual pone en evidencia que las compensaciones por las afectaciones a las que se vio sometida esta población, en ningún momento subsanan lo que para ellos era más importante.
Podría decirse entonces que una adecuada gestión del agua para los habitantes de Nuevo Veracruz, debería contemplar la recuperación de su relación con el río, con la pesca, y en general con sus condiciones de acceso y uso de este bien natural común.
Se constata entonces que las compensaciones establecidas en la Licencia Ambiental del Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo, contemplan resarcir los impactos bajo una lógica homogenizadora que no contempla las realidades socio-culturales de las personas afectadas, por lo que tienden a ser insatisfactorias.
También se identifica a partir de la caracterización de las representaciones sociales que los habitantes de Nueva Veracruz gozan de una identidad comunitaria y relacionan el concepto “desarrollo” con tener unas condiciones de vida que les permitan vivir bien a todos como colectivo. Este vivir bien no es ambicioso, se trata de una forma de vivir desde la sencillez: desde la posibilidad de pescar, de educar a sus hijos, de estar tranquilos y viviendo en el campo.
Finalmente, a través de la prospectiva estratégica se generan recomendaciones de gestión, se identifica que hay actores de gran influencia, y que hay un universo de actores doblegados. Con esto se corrobora lo planteado en la caracterización del territorio hidrosocial en referencia a que en el marco del Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo se presentan muchas asimetrías de poder: son muy pocos los actores que toman las decisiones.