El trabajo consiste en el desarrollo de un modelo nuevo de vivencia del cine específicamente dirigida a los niños. Este combina elementos de juego y de teatro con la proyección de un film animado con efectos de 4d accesibles a un presupuesto limitado (fragancias, humo y burbujas). Tal como se plantea esta nueva experiencia está estructurada en tres partes. Una primera consistente en una serie de actividades dirigidas y relacionadas con el contenido de la película, en la que los niños tengan la oportunidad de jugar, pero al mismo tiempo de comenzar a interactuar con los personajes (en este caso actores debidamente disfrazados), todo esto con el fin de evitar que la espera del espectáculo predisponga negativamente a los niños. En otras palabras, se busca que durante esta etapa los niños jueguen en lugar de esperar pasivamente y que la actividad consistente en el juego dirigido introduzca de modo natural a los jóvenes espectadores en la historia. La segunda parte consiste en la proyección de un corto animado interactivo con elementos del 4d (humo, burbujas y olor), en la que los personajes, un actor y los niños interactúan mutuamente y participan como parte activa de la proyección.