Esta es una historia del emprendimiento familiar colombiano: Un retrato de mi familia, específicamente de las mujeres de mi casa. Aquí hablo de esa noción de progreso que se le impone al futuro. El deber de ser una mejor versión que los padres, enmarcado por un slogan publicitario de un banco llamado Davivienda: “Carro, casa y beca”. Esto marca una historia de economía familiar que hoy en día me sigue permeando. Yo soy Silvia Montilla Cortés, estudiante de Artes visuales de la Pontificia Universidad Javeriana, soy docente de fotografía, creadora de una feria para artistas emergentes, fotógrafa de caballos, eventos y más, en las tardes refuerzo tareas de niños, me encuentro en el programa de ArtBoTutor y al tiempo estoy trabajando en la creación de una nueva galería; y no tengo ni carro, ni casa y escribo por lo menos dos aplicaciones a becas por mes.
Este libro es una reflexión sobre mi lugar en este mundo, de promesas, de emprendimiento y ahora, de economías naranjas en medio de la precarización de la labor del arte.