A comienzos de 2014 se desata la ola migratoria más grande de toda la historia de las relaciones colombo-venezolanas, trayendo consigo que a cifras del 1ro de noviembre de 2018, más de 2’300.000 venezolanos hubiesen abandonado su país en los últimos años y que el 50% de ellos se encontraran hasta el día de hoy en Colombia. Así pues, desde los inicios de esta problemática, el presidente de Venezuela Nicolás Maduro y el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, dieron declaraciones frente al tema y fueron partícipes por acción u omisión de dicha crisis; haciendo posible que desde una mirada posestructuralista se pudiese analizar y abrir el espectro sobre las razones que generaron la problemática humanitaria producida por la migración venezolana hacia Colombia.
Para llevar a cabo dicha tarea, se elaboró un análisis de los discursos enunciativos de ambos presidentes con base en los aportes de Michael Foucault y Teun A. Van Dijk. Esto porque a través de sus estudios, es posible ver cómo las relaciones de poder juegan un papel determinante en la creación de la realidad por medio de la sutileza del lenguaje y cómo el discurso es el recurso principal de los grupos dominantes, por medio del cual, el discurso contribuye a la reproducción del poder, del abuso del poder y de la dominación.
Abordar la crisis migratoria colombo-venezolana a partir de la visión posestructuralista, hizo posible evidenciar la relación entre el lenguaje y el significado social, y entender a través de ello cómo se afecta la realidad y la verdad que se intenta construir. En suma, gracias a un análisis de discurso de este tipo, que revisa cómo las élites a cargo del poder determinan realidades y verdades a partir de sus relaciones de poder, se pudo comprender, por ejemplo, el significado del cierre y apertura de fronteras, deportación de personas en ambos gobiernos; la instrumentalización de los intereses nacionales por parte de los gobiernos para librarse de la responsabilidad de la tragedia humanitaria; y el uso de discursos excluyentes para distorsionar la realidad colombo-venezolana y deshumanizar la crisis; entre otros.