La expansión urbana ha llevado a la fragmentación de los ecosistemas de las ciudades y así mismo ha tenido una implicación grave en las formas de relacionamiento de las personas que habitan estos espacios. En ese sentido se proponen las huertas urbanas comunitarias como espacios claves para desarrollar una estrategia integral para la mitigación de estos conflictos. Se aplicó la triangulación de metodologías cualitativas y cuantitativas para la recolección de datos, por otro lado, para el análisis de datos se empleó el análisis de teoría fundamentada. Los resultados principales de la investigación apuntan a la construcción de categorías que describan las huertas urbanas, además de la relación de estas categorías con el fortalecimiento de relaciones sociales y la apuesta territorial que se ha gestado desde la organización comunitaria.