Descripción
"El cometido fundamental de la Iglesia en todas las épocas y particularmente en la nuestra -escribió S.S. Juan Pablo II en su primera encíclica y lo ha repetido recientemente en Chicago-- es dirigir la mirada del hombre, orientar la conciencia y la experiencia de toda la humanidad hacia el misterio de Cristo, ayudar a todos los hombres a tener familiaridad con la profundidad de la Redención, que se realiza en Cristo Jesús" (Redemptor hominis, 10. Discurso al Episcopado de E.E. U.U., Oct. 5 de 1979).