Este trabajo de investigación ha constatado que el estado actual del debate sobre la minería en Tabio, Cundinamarca es muy débil porque no se ha dado la trascendencia que ésta actividad ejerce sobre el futuro hídrico de este municipio y de Bogotá porque uno de sus ríos llamado Río Frío es uno de los afluentes del Río Bogotá, sobre la actividad agrícola y pecuaria que desarrollan los campesinos, sobre el deterioro paisajístico, sobre la salud y, sobre el desplazamiento a que se pueden ver abocadas las personas que tienen un contacto directo con el impacto que genera esta actividad. Esta investigación reviste una gran novedad por dos cosas: la primera porque se convierte en una denuncia profética sobre los efectos de la actividad minera en el ambiente del municipio de Tabio, y segundo porque este trabajo tiene la novedad de articular el extractivismo en Tabio y el Cántico de las Creaturas de san Francisco de Asís para entresacar fundamentos eco-teológicos que eleven una voz de denuncia, de anuncio y de compasión teniendo en cuenta los aportes que en materia ecológica ha expuesto el Magisterio de la Iglesia, mediante la creación del movimiento franciscano de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) que permita la ejecución de acciones pastorales que incluyan la Palabra y los lineamientos del documento de Aparecida para proteger la ecología humana y ambiental.