Existe una tendencia marcada a hablar de desarrollo como un modelo que impera en la mayoría de organizaciones sin importar su actividad económica. Y es que la necesidad de proponer el desarrollo como una herramienta encuentra su razón de ser en el impacto que genera este modelo en el contexto donde se aplica, porque contempla muchas dimensiones. El contratiempo con el cual se enfrenta el desarrollo es el tiempo, porque para que verdaderamente tenga el efecto el desarrollo debe de cumplir con criterios de continuidad. Es por ello, que el desarrollo se debe de adaptar a criterios de prospectiva, como elemento que le permite anticiparse a situaciones que no permitan el desarrollo.
Ciudad Don Bosco a partir de la configuración de su estructura organizacional se propone: primero lograr impactar en términos de desarrollo toda la comunidad que percibe su misión carismática y en un segundo momento, hacer que ese impacto se sostengan en el mediano y largo plazo a través del análisis de escenarios prospectivos.