El artículo analiza el entramado entre estética y política en relatos que giran en torno al acontecimiento histórico que fue la muerte de Trotsky: La segunda muerte de Ramón Mercader, de Jorge Semprún; El hombre que amaba a los perros, de Leonardo Padura; y la sección “La muerte de Trotsky referida por varios escritores cubanos, años después –o antes”, perteneciente a Tres tristes tigres de Cabrera Infante. A pesar de la diversidad de estéticas (distintas relaciones con la referencialidad y disímiles proyectos formales), los textos parecen tener coincidencias político-ideológicas y en todos el desencanto clausura las utopías políticas.