Leer la novela "Terra Hostra'. implica penetrar todo un cosmos de intelección del ser latinoamericano a través de la plasmación, literaria, de lo que para Carlos Fuentes es nuestra identidad. Podríamos sintetizar su planteamiento diciendo que somos, esencialmente, una cultura mixta, conformada, de un lado, por toda nuestra herencia indígena; y de otra, por el inmenso acerbo cultural occidental impuesto a través de la conquista española. Por eso es que, únicamente, a partir de asumir la anterior simbiosis podremos llegar a formular y defender lo que él denomina como nuestra "originalidad"' . Pues bien, este es el planteamiento de fondo que se descubre al estudiar la novela, la cual está sustentada, a su vez, en el concepto de novela como "mito, lenguaje y estructura"2.