dc.description.abstract | En el Archivo Histórico de la Compañía de Jesús de Roma se encuentra unainformación muy amplia, conocida por algunos historiadores, pero casi totalmente inédita sobre la primigenia historia de la provincia del Nuevo Reino y Quito. A medida que se entra en esos legajos, muy bien conservados por cierto, empiezan a aparecer nuevas luces sobre los hechos que precedieron a la fundación de la provincia por parte del padre Claudio Aquaviva en 1611 y sobre la fundación misma en circunstancias realmente peculiares. Pero, además de los hechos, aparece el espíritu, la razón de la mística, los objetivos de la planeación apostólica de los fundadores; en una palabra, su concepción pastoral que, al tiempo que los impulsó a colaborar en la cristianización del Nuevo Reino, les permitió realizar el ideal ignaciano de la mayor gloria de Dios. La última década del siglo XVI y la primera del XVll fueron definitivas para la conformación de las provincias herederas de la del Nuevo Reino, las de Ecuador, Colombia, Venezuela y parte de la Centroamericana y de la Antillana. Todas ellas celebran los cuatrocientos años de la presencia jesuítica en esta parte del Nuevo Mundo como una ocasión de volver a sus raíces. | spa |