Esta tesis trato de responder una serie de inquietudes personales que he tenido desde niño: ¿porque las agencias de prensa tienen el poder que tienen y determinan lo que debe verse en las secciones internacionales? ¿y porque nosotros salvo algo extraordinario que nos toque a todos no tenemos ni idea de lo que pasa en el mundo?. Inicialmente creía que las agencias, su poder, su control y su hegemonía impedían ese desconocimiento pero mal que bien lo que han hecho durante esos años ha sido informarnos. Al desarrollar este trabajo partí bajo la premisa que lo internacional puede contarse mejor (apelando a los géneros periodísticos muertos: la crónica, el reportaje y la entrevista) y que las secciones internacionales no deben estar sujetas a chismes o breves para rellenar unas líneas y es por ello que trabaje el mundo de los corresponsales y los enviados especiales.