¿Cuáles son las implicaciones de ser mujer y no leer y escribir mal? Mar Candela activista feminista responde “ser una nadie”. Su dislexia la explica como una consecuencia apenas esperable de ser una niña que debía trabajar hasta altas horas de la noche, madrugar a estudiar y luchar por recuperar su año escolar mientras su entorno familiar le reclamaba por su dificultad de aprendizaje. En una cultura letrada la lectoescritura es tecnología de aprendizaje y de participación ciudadana. No obstante, ella no se conformaría con ser cualquier nadie. Ella sería LA nadie que usaría la misma herramienta de su exclusión social para denunciar, educar e informar a través de la escritura de artículos de opinión. Escribir sería su revolución. Freire afirmó en La importancia del acto de leer que para poder responder a tal pregunta es necesario reconstruir las relaciones entre el texto y la experiencia vital porque la lectura del mundo precede a la de la palabra. Reconstruir la trayectoria letrada de Mar Candela como ideóloga y activista feminista y a la vez lectoescritora precaria o poco probable no sólo busca identificar el papel de la lectoescritura en su vida sino también busca encontrar qué tiene que aportar esta trayectoria al estudio de la marginalidad de la cultura escrita encarnada en este grupo social o fragmento de la humanidad que recibió el nombre de “mujeres”.