Los bancos de sangre de cordón umbilical (BSCU) fueron creados con el fin de recolectar, analizar, almacenar y distribuir este tipo de material biológico para el tratamiento de diversas enfermedades. Los BSCU privados almacenan sangre de cordón umbilical (SCU) para ser utilizada de manera personal o familiar, los BSCU públicos almacenan SCU para beneficio de la población en general. La controversia ética acerca de este tipo de biobancos se refiere a la defensa de la existencia de BSCU privados o a la prevalencia de BSCU públicos para favorecer los principios de autonomía y beneficencia respectivamente. Se realizó un análisis de los aspectos biológicos y éticos relacionados con la creación, desarrollo y funcionamiento de los dos tipos de BSCU. A partir de este análisis se evidencia que los BSCU públicos y privados, aunque almacenan el mismo material biológico, difieren tanto en su fundamento como en sus procedimientos. Los BSCU privados brindan información incompleta a los padres a cerca de la posible utilidad de la SCU y cuando estos se encuentran en un momento de vulnerabilidad, razones por las cuales no pueden considerarse decisiones con alto grado de autonomía por parte de los padres. Los BSCU deben fundamentarse en los principios de solidaridad y justicia distributiva. Los BSCU públicos cumplen de manera adecuada con estos principios, sin embargo, es necesario realizar un análisis más profundo de la necesidad actual de su uso y sus implicaciones económicas. En el debate ético en torno a los BSCU debe asegurarse el fortalecimiento de las decisiones autónomas de los padres, para desde lo individual poder asegurar acciones que beneficien a toda la población.