La variación de características morfométricas de Apis mellifera fue estudiada en 4 estaciones a lo largo de un gradiente altitudinal (986 a 2621 m de elevación) en la Cordillera Oriental colombiana. Se analizó si las partes corporales seleccionadas siguen o no la regla de Bergmann, que indica una asociación positiva entre la masa corporal de especies y la latitud (altitud) en la que habitan. Pese al buen volumen de estudios al respecto, pocos analizan los cambios proporcionales entre las partes del cuerpo a lo largo de los gradientes o si las partes siguen una variación homogénea. La variación corporal de A. mellifera fue analizada mediante un análisis multivariado de varianza (MANOVA) y la relación entre cada medida morfométrica y la altitud mediante análisis de regresión. El MANOVA indicó diferencias significativas entre los sitios, donde al incrementar la altitud se observó un aumento en el tamaño de las partes corporales estudiadas, especialmente en las estructuras de vuelo: largo y ancho del ala delantera, ancho del ala trasera y el ancho del basitarsus. La vena cubital 1 mantuvo su tamaño al aumentar la altura, al igual que el número de hamuli, excepto para las abejas de la última estación (2621 m). El peso seco del cuerpo mostró un crecimiento a medida que aumentó la altitud hasta los 2014 m, pero a los 2621 m decreció significativamente. Se encontró una variación clinal positiva en la mayoría de las características morfométricas ligadas al vuelo y algunos apéndices. Sin embargo, el largo del cuerpo, ancho de la cabeza, índice cubital, vena cubital 2 y el largo del ala trasera se mantuvieron constantes en todas las altitudes, exceptuando un incremento significativo a los 2621 m de elevación. Los resultados se asociaron con que a una menor presión atmosférica y menor densidad del aire se puede reducir el potencial de vuelo, lo que puede dar como resultado una relación positiva en el tamaño de las alas y una relación negativa con el peso corporal en las abejas que viven en las partes altas de la montaña. Se concluye que estos insectos son afectados por más variables que las citadas en la regla de temperatura-tamaño de Bergmann y que los cambios morfométricos se podrían dar por razones más complejas.