Description
Dejar el país propio puede ser muy difícil. Implica dejar detrás una familia, amigos, tradiciones, lugares conocidos, un modismo, un sabor, y un aire que solo personas de esa cultura pueden entender y valorar. Entonces, una cultura de diásporas es creada. Sujetos de una cultura de diásporas aún se sienten parte de un lugar de origen, y el sentido de pertenencia a una cultura, sociedad y personas completamente nuevas y diferentes, puede ser un bien imposible de adquirir. La publicidad puede ser, yo de hecho es, arte de este pasado que dejan atrás. Por medio de comerciales, las campañas, las compañías llaman a consumidores a comprar un cierto producto o servicio, y lo hacen a través de palabras, canciones, imágenes, personajes, empaque e identidad visual del producto. Y esto puede volverse signo de una cultura: una canción que todos se saben, un personaje que todos conocieron en su infancia, una imagen que nunca olvidarán y un empaque que los transporta al pasado, a un hogar, a una memoria. Ese sentimiento es, en pocas palabras, nostalgia: querer volver a una memoria, a un tiempo y no realmente a un lugar. Nostalgia, entonces, se convierte en un deseo imposible.