La alineación con Estados Unidos es uno de los rasgos más constantes de la política exterior colombiana. Sin embargo, el paso del orden bipolar a uno multipolar, la emergencia de Brasil como potencia regional, y la llegada de Juan Manuel Santos a la presidencia de Colombia, pueden estar incitando un cambio respecto a este alineamiento incondicional. Uno de los elementos más significativos en este cambio es el debilitamiento de la Doctrina Monroe como patrón de relacionamiento entre Colombia y Estados Unidos, y el surgimiento de un proyecto de región llamado Sudamérica, liderado por Brasil, que retoma algunos de los elementos del bolivarismo de los siglos XIX y XX, pero que los actualiza para constituir una alternativa al monroísmo en los albores del siglo XXI.