Las prerrogativas o potestades exorbitantes reguladas por la Ley No. 737, Ley de Contrataciones Administrativas del Sector Público y su Reglamento, tienen como principal objetivo proteger el interés público ínsito en cada uno de los contratos administrativos. Sin embargo, es posible encontrar ciertas imprecisiones terminológicas, omisiones de regulación de procedimientos y contradicciones entre la Ley y el Reglamento.