El autor se aproxima a las grandes transformaciones que se observan en los jóvenes en el ocaso del siglo anterior y el comienzo del nuevo milenio. Algo ha ocurrido, es necesario identificar los cambios para poder acertar en el anuncio de la buena noticia de Jesús, el Reinado de Dios. El autor desarrolla su reflexión tratando los siguientes puntos: “Nuestro trabajo pondrá de relieve cómo el ser humano está proyectado en la imagen, en la informática y en las telecomunicaciones. Haremos nuestra reflexión sobre los imaginarios colectivos y sociales; luego nos centraremos en el imaginario religioso, así como en algunas imágenes que distorsionan el rostro auténtico de Dios; y finalmente expondremos los aportes que han realizado los estudiantes de teología sobre el imaginario religioso posmoderno”.
A.M.D.G.