Description
La escritora plantea las preguntas elementales de la formación: ¿quiénes forman?, ¿para qué formar?, etc., y conduce por el proceso que se debe seguir para aprender a vivir la formación con Espíritu: “Intención del proceso sería autoformación, hacernos cargo de nuestro proceso, de nuestra vida, dejarnos moldear por EL ALFARERO para ser capaces de asumir el reto de moldear nosotros nuestra propia vida, y convertimos también en alfareros.
Se trata de hacernos nosotros mismos a partir de la materia prima que nos ha sido regalada: nuestra vida, nuestro cuerpo, nuestras habilidades y debilidades, nuestra historia. De allí que mientras haya vida, debemos estar auto formándonos...en un proceso orgánico, donde periódicamente se realicen las evaluaciones correspondientes.
Ello sería el símil de cotejar con una persona de más experiencia, la figura de nuestro acompañante espiritual, cómo va nuestra vida, si sigue realmente el rumbo que deseamos, o si sólo nos lo creemos.
En resumen, la formación busca formar hombres y mujeres libres, autónomas, interdependientes, realistas, despiertas, con gran capacidad para amar y trabajar”.