En este artículo se hace una lectura de la experiencia de los Ejercicios Espirituales. El autor analiza el significado antropológico y las implicaciones de esta experiencia, desde la realidad latinoamericana. La experiencia original y auténtica de Dios, diviniza humanizando para vivir el compromiso por el reino de Dios. Dios salva desde dentro de la historia: “En nuestro proceso de reflexión hemos destacado que nuestra imagen y semejanza con Dios no es una analogía de un Dios en solitario sino del Dios Ágape, comunión perfecta en el amor que se solidariza con la humanidad y nos incluye en su proyecto salvífico a pesar de la injusticia o la violencia que desfigura nuestra condición humana".