La autora ayuda a apreciar el aporte y la participación de la mujer en la cultura y en la historia. Su reflexión hace descubrir la plenitud femenina a través de la experiencia espiritual de Teresa de Jesús quien desarrolla y madura su capacidad relacional haciéndola cada vez más parecida a la de Jesús hasta llegar a ser “fuego de caridad”. La autora propone: “ir construyendo esa tienda del encuentro y la posibilidad de un nuevo espacio de relaciones que renueve desde la entraña cada comunidad, como esas células vivientes que son capaces de renovar todo el organismo. Es importante poner los medios para ir creando ese cambio de mentalidad que ayude a construir una nueva humanidad”.