dc.description | En este artículo trataré de hablar sobre varios aspectos que desde mi punto de vista pueden ayudar a visualizar, y por ende, a llegar a tener un horizonte más amplio sobre cómo vivir la espiritualidad desde una búsqueda profunda de encontrar la vocación laical. Esta búsqueda nos va a encaminar a dar pasos firmes que se traduzcan en compromisos sociales con la realidad que nos corresponde vivir (entiendo por realidad el tiempo y el espacio en que nos estamos moviendo).
Al hablar de Espiritualidad laical no puedo dejar de referirme a todas y cada una de las experiencias vividas en diferentes momentos de mi vida que le fueron dando CUERPO a este estilo de espiritualidad que es tan peculiar. Me refiero a las visitas a las comunidades rurales para llevar a cabo un acompañamiento a los habitantes de esas zonas; esto consistía en potenciar todos los recursos que ellos tenían a nivel humano y a fortalecer sus niveles de toma de conciencia sobre el quehacer como cristiano(a) comprometido(a) desde su propia comunidad. Además, de las experiencias inolvidables de ser catequista de primera comunión y de confirma en una zona urbana, concretamente en la parroquia que me correspondía, hasta llegar a formar experiencias que me ayudaron a vivir y sentir desde muy joven la espiritualidad laical fue el hecho de formar parte de un grupo de jóvenes en la parroquia. Esto me abrió nuevos horizontes a nivel espiritual, me hizo descubrir esa espiritualidad laical de la cual me estoy refiriendo, y me dio la pauta para encaminarme a seguir descubriendo más cosas. Mi experiencia ha sido lo siguiente: en la medida en que conozco más de algo, siento que "GUSTO Y SIENTO". Esto lo traduzco a nivel espiritual de la siguiente manera: Cuando inicio en mí esta motivación, cada momento era un capítulo nuevo en saber tomarle sabor a cada una de las experiencias: individuales o colectivas que he ido acumulando.
No puedo dejar pasar por alto que estas experiencias las viví al lado de mi familia. Ellos desde muy pequeña me fueron fomentando el amor y el servicio por las demás personas en cosas muy sencillas; muy concretamente me lo transmitió mi abuelita (mamita). Otro elemento importante de transmisión en el descubrimiento de esta espiritualidad fue el contacto con los Padres Dominicos que en ese momento eran los que estaban a cargo de la parroquia a la que pertenecía. La Espiritualidad de Santo Domingo me ayudó a sensibilizarme con el sufrimiento del "otro", además de tener una actitud de servicio. Por último, otras personas que me ayudaron en este primer momento fueron las Hermanas Dominicas de la Anunciata, responsables del Colegio donde me eduqué. A ellas les debo muchas de las cualidades que hoy día poseo. Siento que la Espiritualidad del Padre Francisco Coll, fundador de dicha Congregación me ayudó a no perder de vista que cada acción que desarrollemos debe de ir acompañada por una oración. Entiendo por oración la comunicación con ese Dios que se te convierte en un amigo, en un hermano, en alguien con el cual puedes confiar en cualquier momento de tu vida, y con el cual puedas apostar para aquellos proyectos que vayan en beneficio de la humanidad. Las Dominicas me enseñaron que no sólo en la capilla voy a encontrar a ese Dios, sino en cada una de las personas que me encuentre a diario. Bendito sea el momento en que llegué a tener contacto con estas dos congregaciones.
Así mismo, me quiero referir a la última parte de mi vida; desde el año 86 hasta la fecha, que es cuando empecé a Descubrir, Conocer, Gustar, Sentir y Vivir a diario la gran experiencia de la Espiritualidad Ignaciana que es la que nos acompaña en el movimiento laico de las Comunidades de Vida Cristiana, es un movimiento laico a nivel internacional.
Considero que hablar de la Espiritualidad Ignaciana en estos tiempos tan difíciles que nos toca vivir no es tan fácil; es un gran reto, el cual supone muchos cambios internos y externos de la persona, los cuales son los que van a facilitar mejor tu vivencia, y por ende, a poder Vivirla y Transmitirla. Me referiré un poco a estos cambios o a estas actitudes. | |