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dc.creatorGuerrero, José María
dc.date1996-03
dc.date.accessioned2023-03-22T18:06:43Z
dc.date.available2023-03-22T18:06:43Z
dc.identifierhttp://repositorio.uca.edu.ni/4049/1/Comunidad%20eclesial%20don%20y%20tarea.pdf
dc.identifierGuerrero, José María (1996) Comunión eclesial: Don y tarea. Diakonia (77). pp. 4-9.
dc.identifier.urihttps://hdl.handle.net/20.500.12032/78466
dc.descriptionEs necesario, antes que nada, aclarar la noción de comunión. Que sea una noción compleja, como nos advierte la Relación final del Sínodo de 1985, no cabe la menor duda. Para algunos la comunión se propone en un sentido funcional, más fruto de coordinación de funciones y ministerios, de “inserción orgánica”, que de circulación de vida por la reciprocidad entre los miembros, que, según el proyecto de Dios, se necesitan mutuamente. O se contempla en un sentido reductivo, con relación al Papa y los obispos, y en clave de docilidad, disponibilidad total, cooperación, términos utilizados, con alguna frecuencia, en sentido de sumisión pasiva. 0 se proyecta como identificada con lo que, a lo más, son medios o signos de comunión: vida común, vida fraterna, etc. El Sínodo extraordinario de los Obispos de 1985, nos ha ofrecido por primera vez las líneas fundamentales de la comprensión teológica de la “comunión”. ¿Qué significa la palabra compleja “comunión”? Fundamentalmente se trata de la comunión con Dios, por Jesucristo en el Espíritu Santo. Esta comunión se tiene en la Palabra de Dios y en los sacramentos. El Bautismo es la puerta y el fundamento de la comunión de la Iglesia; la Eucaristía es la fuente y el culmen de toda la vida cristiana (cfr. LG 11). La comunión del Cuerpo Eucarístico de Cristo significa y hace, es decir, edifica, la íntima comunión de todos los fieles en el Cuerpo Místico que es la iglesia. Por ello, la eclesiología de comunión no se puede reducir a meras cuestiones organizativas o a cuestiones que se refieren a meras potestades. La eclesiología de comunión es el fundamento para el orden de la Iglesia... (Cfr. 1 Cor 10, 16ss.) [Rel. Fin., II, C1]. El texto es denso y preciso. La categoría “comunión” se refiere al misterio de Dios en su vida trinitaria que se ofrece para ser participado por el creyente y se tiene en la autorrevelación de Dios al hombre que éste debe acoger en la fe y se edifica sobre una base sacramental. El bautismo es la puerta de entrada al ámbito divino de la “comunión”, es decir en la intimidad de la vida del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, en la comunión, por tanto, de la unidad y de la trinidad del ser de Dios. La Eucaristía realiza vitalmente la comunión de los fieles con Dios y entre sí.
dc.formattext
dc.languagees
dc.publisherCentro Ignaciano de Centroamérica
dc.relationhttp://repositorio.uca.edu.ni/4049/
dc.rightscc_by_nc_nd
dc.subject243 Escritos evangelizadores para individuos
dc.titleComunión eclesial: Don y tarea
dc.typeArticle
dc.typePeerReviewed


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