En las páginas siguientes propongo algunas reflexiones sobre el examen general ignaciano de conciencia y un nuevo modo de practicarlo desde la perspectiva del discernimiento espiritual y de la contemplación para alcanzar amor, como sugerencias para recuperar su significación en nuestra vida espiritual.
San Ignacio dejó en el texto de los Ejercicios (EE 43) un MODO DE HACER EL EXAMEN GENERAL DE CONCIENCIA distribuido en cinco puntos:
1) Dar gracias a Dios nuestro Señor por los beneficios recibidos;
2) pedir gracia para conocer los pecados y lanzarlos;
3) demandar cuenta al ánima de pensamientos, palabras y obras;
4) pedir perdón a Dios nuestro Señor de las faltas;
5) proponer enmienda con su gracia.
Esta práctica la introdujo en las Constituciones de la Compañía de Jesús y la solía recomendar en sus cartas e instrucciones.