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La incomprensión del presente nace fatalmente de la ignorancia del pasado Pero no es, quizás, menos vano esforzarse por comprender el pasado si no se sabe nada del presente (Marc Bloch).
En general, se considera que la historia es una disciplina muy difícil de estudiar. Se cree que hay que memorizar una gran cantidad de fechas, nombres y datos, olvidando que la historia nos brinda nuevas formas de mirar hacia el pasado, comprender el presente y participar de forma activa en la construcción del futuro. La historia meramente política, el interminable desfile de caudillos, pasó a un segundo plano. Más que hablar de progreso y modernización, de desarrollo y crecimiento como obra maestra de algún personaje notable, abordaremos los costos sociales y económicos que tales procesos tuvieron en el pasado y siguen teniendo en el presente para las grandes mayorías de esta nación empobrecida. En realidad, esas grandes mayorías, excluidas de los beneficios de la modernización o del ajuste estructural, no pueden ser condenadas al anonimato, ni desaparecer como por arte de magia en libros que glorifican los logros de tal o cuál régimen político.
En este módulo, usted encontrará citas y ejemplos tomados directamente de fuentes primarias, o sea de Gacetas o diarios oficiales de cada época, recopilación de leyes o correspondencia oficial, con el propósito de que tenga acceso al testimonio de los actores. Desafortunadamente, no todos los protagonistas de los procesos históricos han dejado testimonios, memorias o recopilaciones. Recordemos que las grandes mayorías ladinas e indígenas no tenían acceso a la educación, pero que eso no significa que hayan estado ausentes o que hayan permanecido pasivas ante todo aquello que amenazara su cultura, sus tradiciones, su forma de vida y, sobre todo, su libertad y su dignidad.
El módulo está estructurado en tres unidades auto formativas. Nuestro período de estudio se inicia en la década de 1820 y concluye en la década de 1990. Por razones de tiempo y espacio no es posible introducir aquí el estudio de las épocas precolombina y colonial. Tampoco es posible agotar todos los temas. Es necesario tener presente que el estudio de nuestro pasado es un proceso continuo. Las interpretaciones sobre los hechos históricos pueden modificarse en la medida en que se encuentran nuevas evidencias. No abordaremos aquí las gestiones y negociaciones acerca del proyecto canalero, durante el siglo XIX, ni la guerra contra los filibusteros, por ser temas que se pueden abordar en otras asignaturas, y por su extensión y complejidad.
