Description
Es muy nueva en el área centroamericana la reflexión y el acompañamiento de las universidades a las experiencias sobre el desarrollo local y casi inexistente el abordaje del desarrollo local transfronterizo. Esa deficiencia se vuelve más grave ante al abandono tradicional de las fronteras en el área y ante la falta de políticas integrales para abordar su variada problemática, acusada por la pobreza y la marginación. Ese déficit de atención a la problemática fronteriza ha sido parte de la inexistencia de políticas territoriales integrales por parte de los gobiernos centrales, con algunas excepciones impuestas por circunstancias particulares como la política de autonomía de las Regiones Autónomas del Atlántico-Caribe en el caso de Nicaragua. Otros esfuerzos en esa dirección de establecer políticas territoriales, como la constitución de los Consejos de Desarrollo Departamentales en el gobierno de Enrique Bolaños que lograron establecer planes de desarrollo en sus territorios, no lograron articularse como parte de un plan integral del país ni tampoco continuidad en el nuevo gobierno. El centralismo tradicional que ha tenido como uno de sus efectos los grandes desequilibrios territoriales de nuestros países ha conllevado a que predominen las enormes brechas de desarrollo humano en los territorios dentro de los países y entre los países del área. Esas diferencias suelen manifestarse de manera más evidente en las zonas de frontera, tradicionalmente vistas como lugares de tráfico y de conflicto, muros de contención y barrera a las amenazas externas, habiendo poca referencia a las brechas de desarrollo humano y a las relaciones de cooperación transfronteriza.