dc.description | Esta investigación parte de mi propia historia de implicación en un proyecto educativo político sostenido por una institución de educación popular que se constituyó, como muchas organizaciones no gubernamentales en la década de los ochenta, para favorecer los procesos organizativos de los habitantes de colonias suburbanas. Mi ubicación en el estudio desde diferentes roles y mi presencia en la vida de los sujetos, a lo largo de veinte años, ha influido para lograr un acercamiento desde distintos vértices. La pregunta central es ¿cómo se articulan la socialidad, la reflexividad, la imaginación y la memoria en las personas que participaron en un proyecto educativo político, veinte años después? Una inquietud que me acompañó durante los últimos quince años, giró en torno al destino de todos aquellos que se involucraron de diversas maneras en experiencias
organizativas. Tenía como intuición el que los habitantes de los suburbios, que hace veinte años se denominaron a sí mismos como organizados, aprendieron a habitar la sociedad de manera distinta que los que no pasaron por este proceso, que sus vidas cotidianas tenían matices particulares. Para ello recupero y analizo las narrativas de un grupo de actores sociales que formaron parte de una experiencia educativa, organizativa y política, desde la historicidad de sus representaciones. Esta prenoción se fue fortaleciendo desde mi interacción permanente con muchos de los actores que formaron parte de la organización, referente de este estudio. Me resaltaba en los sujetos de esta indagación su manera de tomar decisiones, de
mantenerse informados, de sostener diversos niveles departicipación en diferentes grupalidades, de enfrentar los problemas y los riesgos de otra manera, de tejer la historia familiar desde nuevas formas relacionales y de sostener en la memoria el recuerdo del nosotros organizativo y comunitario. Incluir en este estudio las rupturas, las tensiones, los riesgos y las incertidumbres ha sido importante para salirse de la sacralización del sujeto y de los movimientos
alternativos. Ello favorece el avance en la formulación de una teoría del sujeto, del sujeto pobre, excluido, desconectado, visto desde los acercamientos de comunicación, cultura y sociedad, liberada de las lecturas economicistas, aunque sin dejar de lado lo económico y lo político, que implica retomarlos desde la vida de la persona. Esto ha
supuesto el reconocer que no todos los pobres son iguales y abandonar las tendencias homogeneizantes de la pobreza. Una decisión asumida, en ésta línea, ha sido poner el peso de la indagación en el movimiento, más que en las estructuras.
Los protagonistas de ésta novela de participación política han transitado por diversos lugares, han realizado distintos viajes entre las fronteras desde su actuación protagónica; son actores en la construcción de prácticas simbólicas, desde su implicación en acciones en la esfera pública. | es |