La discriminación, marginación y exclusión de que han sido objeto los
pueblos indios en nuestro país se expresa en distintos aspectos que
impactan negativamente el desarrollo de los habitantes de las comunidades
indígenas. Los altos índices de mortalidad, desnutrición, analfabetismo y
violación de sus derechos humanos, entre muchos otros, son problemas que
generan un escenario de difíciles expectativas a futuro para estas
colectividades.
Un ejemplo de esta exclusión lo constituye sin duda el tema educativo. Si
bien se han diseñado planes públicos para atender los niveles básico, medio
básico y medio superior que ofrezca respuestas a esta demanda, en el caso
de la formación profesional existe un bajo índice de ingreso de estudiantes
indígenas tanto en universidades públicas como privadas. Esta circunstancia
se expresa en el casi imperceptible número de egresados indígenas
profesionistas en las diferentes ramas del conocimiento, quienes enfrentan
además el problema, al igual que muchos otros egresados no indígenas, de
nulas oportunidades para ejercer su profesión de manera eficaz que les
permita satisfacer sus necesidades personales y/o familiares.
Este trabajo intenta aportar algunos elementos para la mejor comprensión de la educación intercultural en México y hacer un análisis de las perspectivas institucionales en torno al reto que propone este tema para la universidad, en particular para la Universidad de Guadalajara.