Desde hace varios años en el Perú, los problemas de la exclusión/inclusión social se han identificado como un tema central para las políticas públicas y, en paralelo, se vienen creando organizaciones de voluntariado, principalmente de voluntariado juvenil. Estas organizaciones plantean actividades enfocadas en reducir las brechas económicas y sociales, fomentando una mayor inclusión de los sectores sociales menos favorecidos. Generan un gran movimiento de personas, pero muchas carecen de una buena organización o “profesionalización” de sus funciones. Una de sus áreas de enfoque es la capacitación empresarial a personas de bajos ingresos o micro y pequeñas empresas para mejorar su situación económica. Y estas últimas representan el 99% del total de empresas peruanas. La presente investigación es un estudio exploratorio que permitió identificar y documentar buenas prácticas de las organizaciones de voluntariado dedicadas a la capacitación empresarial, lo que serviría de ayuda para muchas organizaciones. Asimismo, se logró identificar algunas oportunidades de mejora para estas organizaciones de voluntariado.