Al recorrer los principales centros comerciales de la capital, es notoria la ausencia de clientes que sean motivados a entrar a una tienda con la finalidad de hacer una compra efectiva. Los propietarios de los negocios (Pymes) buscan desesperadamente el antídoto para sanear la mala racha a la que están sometidos. “Probablemente ahora es un buen momento para replantearse cuál es el papel que el marketing debe desempeñar en la organización tanto para afrontar la crisis, como para salir reforzados después del ciclo negativo. “Por lo que respecta al mundo del marketing, es una buena oportunidad para centrar los esfuerzos en ofrecer la mejor experiencia y el máximo valor a los clientes.