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dc.creatorLópez de la Fuente, Julio
dc.date2002
dc.date.accessioned2022-09-22T13:30:47Z
dc.date.available2022-09-22T13:30:47Z
dc.identifierhttp://repositorio.uca.edu.ni/2562/1/Cuaderno%20de%20Investigaci%C3%B3n%20n%C3%BAmero%209.pdf
dc.identifierLópez de la Fuente, Julio (2002) Radiación ultravioleta – B en Managua 2000 – 2001. Cuadernos de Investigación (9). pp. 1-40. ISSN 1729-2034
dc.identifier.urihttps://hdl.handle.net/20.500.12032/52837
dc.descriptionLa energía de la radiación ultravioleta (UV) es un 7.8% de la correspondiente al espectro total solar, si bien sus ondas son de elevada energía. Por otra parte el rango de UV-B contiene un 2% de la energía en el rango UV-A, lo cual hace difícil y costosa su medición. La radiación UV-C no llega a la tierra, afortunadamente. Por otra parte el ozono, un gas tóxico y de fuerte olor, es indeseable en las proximidades de la superficie terrestre a causa de sus acciones perjudiciales; pero también es vital su presencia en la estratosfera porque resguarda la vida sobre el planeta al absorber la mayoría de los rayos UV-B permitiendo tan solo el paso de una cantidad tolerable para la vida orgánica. Así pues, los rayos UV-B afectan directamente el material genético de los seres vivos y necesitan ser filtrados continuamente en la atmósfera; pues de lo contrario ocasionan efectos perniciosos sobre el hombre y su entorno. En los trópicos apenas si existen die estaciones en la tierra que registren el ozono y la radiación UV. Si bien sobre el cinturón solar ecuatorial la variación de la delgada capa de ozono se mantiene mínima y regular, permitiendo el paso de una considerable radiación UV-B incidente sobre la tierra, se desconocen experimentalmente la intensidad del flujo local de la UV y los principales factores que conforman su comportamiento. Oportunamente se han obtenido en la estación Actionométrica UCA los registro de la UV-B durante los años 2000 -2001, en especial a lo largo del 2000 que fue un año de máxima actividad solar y por tanto de alta radiación UV. Por eso no me sorprende que el año 2001 presente un flujo menor del 14% en el registro anual del MED (Mínima Eritema Dosis) bajo la presencia de una mayor cobertura de nubes que la del año anterior. Estas primeras mediciones de la radiación UV-B a través de los registros de MED en toda Centroamérica y su análisis correspondiente ha desembocado en una múltiple correlación del modelo realístico del MED en función de variable solares – meteorológicas. Se dispone de una programa PC en BASIC y VISUAL BASIC que al considerar: a) el tipo de piel, b) la cobertura de las nubes, c) la actividad a realizar, y d) el tipo de protector solar, calcula con un error de 10% la duración permisible en minutos de la exposición solar a partir de una escogida hora de iniciación, antes de sufrir el impacto de un Med/hr (Mínima Eritema Dosis). Razón estación Solar, UCA. Todo lo cual fundamenta y construye las bases informativas de la radiación UV-B para los estudios de impacto ambiental en el entorno de Managua y sus alrededores.
dc.formattext
dc.languagees
dc.publisherUCA Publicaciones
dc.relationhttp://repositorio.uca.edu.ni/2562/
dc.rightscc_by_nc_nd
dc.subject621 Física aplicada
dc.titleRadiación ultravioleta – B en Managua 2000 – 2001
dc.typeArticle
dc.typePeerReviewed


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