Las nuevas funciones asignadas por ley al Ministerio Público son una necesidad dentro del marco global de modernización del Sistema Judicial Penal Nicaragüense ya que, en el nuevo proceso penal, la Policía continuará cumpliendo con las atribuciones y funciones establecidas tanto en la Constitución Política como en la Ley No. 228 (Ley de la Policía Nacional). Pero una nueva ley buena y necesaria, además de ser obedecida, necesita legitimidad social que la haga viable en su aplicación, sin que las instituciones que han acumulado experiencia en el campo de la investigación criminal pierdan identidad y capacidad de desarrollo.