| dc.description | El tráfico vehicular ha modificado el desarrollo ordenado de nuestra ciudad y, como resultado, las zonas de juego (recreación) para los niños se han hecho peligrosamente limitadas. Esto sumado a la corrupción estatal que permite el desarrollo de proyectos sin el cumplimiento de los requerimientos mínimos, en este caso en particular, de áreas verdes y parques. Nuestros modernos complejos residenciales son en verdad más verdes que antes, en los suburbios los viejos patios particulares de las casas del centro han sido remplazados por floridos jardines y han desaparecido los callejones obscuros, permitiendo el ingreso de la luz del sol más directamente a los espacios interiores y exteriores. Con el incremento incesante del tráfico motorizado, la calle ha dejado de ser un campo de juego, aunque continúa atrayendo a los niños a pesar de sus peligros. Incluso el mundo de los adultos, la mayor fuente de inspiración de los juegos infantiles, no se centra ya en el hogar, y el resultado está siendo la ciudad-dormitorio. En todos los aspectos quien más está perdiendo es el mundo de juego de los niños. No debemos olvidar que la vieja ciudad era, generalmente hablando, una ciudad para peatones, donde niños y adultos se movían sin verse prácticamente estorbados por el tráfico motorizado. Actualmente en las ciudades, el campo específicamente diseñado para juego en el supuesto de que exista representa lujo, puesto que en realidad no es esencial según los planificadores, ya que se trata de sacarle el mayor provecho al terreno en que se planifica. Por lo que el campo de recreo o jardín que uno puede aspirar a poseer, podrá ampliarse según sus posibilidades económicas. El hombre por naturaleza tiene ciertas necesidades básicas, así como tipos de actividades que debe suplir, entre ellas el esparcimiento y la recreación, lo que demanda la creación de parques con mayor y mejor equipamiento, áreas naturales (reserva forestal), áreas deportivas y de diversión, museo, expo y servicios, a los que se les denomina y clasifica como Parque Metropolitano. Actualmente se carece en nuestro país de este tipo de parques. Los esfuerzos se canalizan al rescate de los parques actuales y su mantenimiento, así como a la creación de otros de menor categoría. Según la clasificación de parques definida en la "Guía para Recreación y Parques de California" un Parque Metropolitano debe dar servicio a una población de 800,000 habitantes. Lo que determina la necesidad de creación de un mínimo de cinco parques de este tipo para la ciudad de Guatemala, que se estima tendrá una población de cuatro y medio millones al año 2,010. Lo importante de éstos, aparte de cumplir con las características mencionadas anteriormente, es que permiten la creación de un ambiente libre de todo tipo de contaminación visual, ambiental y de sonidos donde puedan tener un esparcimiento total personas de toda edad conjuntamente, a través de áreas específicas dentro de un ambiente adecuado. Así como la creación de grandes pulmones para la ciudad, ya que su desmedido y rápido crecimiento, así como su costo no permite la creación o por lo menos la reserva de este tamaño de áreas para su futura implementación, como tal Todo esto nos dirige a un objetivo primordial, dar los primeros pasos para minimizar el déficit de espacios recreativos de esta categoría (Parque Metropolitano). Diseñando un modelo ideal mediante el reacondicionamiento de una de las dos únicas áreas existentes que cumplen las características de tamaño y distancia en su ubicación; Parque Naciones Unidas, incluyendo el área Parque las Ninfas, en Amatitlán, y la otra, Florencia en el departamento de Sacatepéquez; tomando para este estudio la primera. Para poder detectar a que categoría pertenecen los parques, se ha tomado como base el criterio personal, el equipamiento y ubicación, haciendo la aclaración que su categoría podría variar en función de criterios y del mejoramiento de los elementos existentes. | |
