dc.description | El derecho penal tiene como fin principal, cumplir y que se cumplan los principios fundamentales de legalidad, presunción de inocencia, seguridad, la proporcionalidad y principalmente la aplicación de la ley dentro del marco jurídico, agotando el debido proceso. En tal sentido la reconstrucción de los hechos permitirán al juzgador de manera imitativa, recrear o repetir el delito, tratando que el mismo se lleve a cabo bajo las mismas condiciones en que se presume pudo haber sido cometido, procurando que se den las mismas características como ubicación, iluminación, posición y razonabilidad, entre otros. Para ello el patrón de manchas de sangre, juega un papel sumamente importante en la reconstrucción de hechos delictivos, ya que, según su forma, dimensión, impregnación, brinda elementos que coadyuvan a determinar la comisión de un hecho delictivo, y más aún la participación o no del sospechoso; razón por la que su diligenciamiento debe cumplir con los principios rectores de pertinencia, asistencia técnica, idoneidad, eficacia y participación. Pesé a la reconstrucción de los hechos dentro del proceso penal, no constituye un medio de prueba, por lo que para que ésta tenga un verdadero valor probatorio dentro del proceso, y sea la pieza clave que le permita al juzgador una adecuada y justa toma de la decisión final, y que lo lleve al descubrimiento de la verdad, la diligencia deberá llevarse cumpliendo los estándares técnico profesionales desarrollados en el presente trabajo | |