dc.description | En Quetzaltenango, la vestimenta típica de las mujeres del pueblo Quiché (como de otras mujeres mayas), en sus orígenes, se tejió en telar maya (o de palitos), con formas rectilíneas, y actualmente con pliegues ondulantes y armonía de color; que no obedece a la aseveración errónea que se ha contado alguna vez, en el sentido de enmarcar la vestimenta típica como un uniforme colonizador, sino al contrario, este elemento cultural obedece a la acción creadora de manos femeninas, que resguardaron y continúan protegiendo, la cosmovisión de un pueblo a través del tiempo, y que en la esfera nacional representa una enigmática diversidad comunitaria, tal como han demostrado estudios antropológicos realizados por estudiosos del tema. En la mujer Indígena el uso de su traje es un elemento importante de la identidad (aunque no el único), y máxime aún cuando en ella se reúnen las dimensiones de femineidad, de pertenencia y de tener una misión especial y muy importante, cual es la de constituirse en un medio de transmisión y conservación de la cultura indígena para Guatemala y para el mundo. Y no obstante de esos valores que representa, ha soportado múltiples discriminaciones, lamentablemente, por ser en muchos casos pobre, por su étnia y por ser mujer que se perfila desde su niñez, y que afectará durante toda su vida su autoestima, y otros factores debidos a la pérdida de identidad cultural, los medios de comunicación, la moda occidental, migraciones, e inclusive el enfoque etnocéntrico del ámbito educativo, sobre todo por el uso de uniformes que lejos de generar unidad provocan conflictos, por los convenios estudiantiles mal redactados (en este orden de ideas) a los que obligadamente las estudiantes y los padres de familia se deben ajustar. | |