| dc.description | El conflicto de Ucrania surgió hace siete años como consecuencia de la negativa del expresidente ucraniano Yanukóvich de firmar un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea a finales de 2013, acompañado de una serie de problemas con los que el país ha luchado históricamente y que cobraron mayor fuerza durante el año 2014, habiendo generado graves problemas al interior del país tales como: manifestaciones masivas, fragmentación en la población y la anexión de Crimea a la Federación de Rusia. Lo anteriormente señalado dejó en el país el emergente conflicto en la región del este de Ucrania, en el Donbass, específicamente en Donetsk y Lugansk. El conflicto tomó gran importancia a nivel internacional siendo actualmente un tema de discusión. Desde que se desarrolló el conflicto al este del país, las partes involucradas han realizado esfuerzos para restablecer la paz y lo han hecho a través de los Acuerdos de Minsk. Sin embargo, estos acuerdos no han tenido los resultados esperados, ya que a lo largo de su implementación han presentado dificultades para la plena ejecución de las medidas acordadas, dificultades que responden, en parte, a la misma formulación de los acuerdos, a la importancia de la condición geopolítica de Ucrania y a problemas de equilibrio del poder y seguridad en la región; los cuales son examinados en el presente trabajo. Luego de que los Acuerdos de Minsk quedaran congelados por un tiempo, en el último año y medio se ha presentado la oportunidad para retomar la implementación de las medidas en dichos acuerdos, gracias a la buena voluntad de las partes implicadas: Alemania, Francia, Rusia y, sobre todo, la de Ucrania, para ponerle fin al conflicto en la región del Donbass | |
