El texto científico describe un experimento realizado con el objetivo de evaluar la utilidad de un nuevo tipo de ladrillo hecho a base de cartón combinado con cemento. Para su elaboración, se trituraron conos de huevo reciclados y se mezclaron con cemento en una proporción de 2 kilogramos de cartón por cada kilogramo de cemento. La mezcla se vertió en moldes para su secado y se sometió a varias pruebas físicas basadas en la norma NMX-C441-ONNCCE-2013 para uso NO estructural. Los resultados obtenidos de las pruebas indicaron que el bloque de cemento y cartón tenía una buena resistencia al fuego y resistencia a compresión simple. Sin embargo, no cumplió con las expectativas en dos áreas: absorción de agua y módulo de elasticidad. Estos resultados indican que el material no cumple con la norma establecida y, por lo tanto, no se recomienda utilizar en obras de construcción para carga. A pesar de esta limitación, hay que señalar el hecho de que el bloque de cemento y cartón aún podría ser útil para aplicaciones específicas de ornamentación o en diseños de interiores en construcción. Podría ser utilizado en lugares donde no se espera que soporte cargas pesadas o presiones extremas. En general, el experimento proporciona información útil sobre las propiedades físicas del ladrillo de cartón y cemento. Los resultados de las pruebas pueden ayudar a los ingenieros y arquitectos a tomar decisiones informadas sobre el uso de este material en proyectos de construcción específicos ya que puede ser útil en situaciones específicas.