El presente trabajo tiene como objetivo describir la experiencia de implementación
de la Educación Sexual en un colegio privado de la ciudad de Bogotá. Paralelamente, se
explora esta experiencia desde la mirada de dos profesionales con amplia trayectoria en el
sector distrital trabajando en temas relacionados con la pedagogía y la educación sexual. Se
implementó una metodología cualitativa y un enfoque histórico hermenéutico
comprendiendo las convergencias y divergencias entre la teoría y la práctica de las acciones
que se adelantan a favor de una Educación Sexual Integral.
Los hallazgos sugieren el gran espectro que abarca la sexualidad y la educación en
sexualidad, lo complejo que resulta definirla en términos de sus contenidos, estrategias y
objetivos desde el sector educativo, destacando la importancia de prevenir riesgos
sanitarios pero también riesgos no sanitarios. Estos últimos, sin embargo, se mantienen en
disputa en tanto se da prevalencia a los primeros. Por otro lado, se encuentra que la
participación de las familias es tan importante como poco adherente e involucrado en el
proceso. Por lo tanto, es necesario fortalecer los puentes de comunicación con las familias,
con el diseño de estrategias que tengan un impacto en las habilidades que se propone
fortalecer en los estudiantes, para así construir herramientas que hagan a los padres
partícipes en el proceso. Asimismo, resulta pertinente un mayor esfuerzo en la
transversalización del enfoque de prevención de la violencia sexual a lo largo de todo el
ciclo escolar, siendo fundamental incluir a las familias en dichas estrategias. Finalmente, se
destaca que desde el ejercicio profesional y político se encuentra en juego la interpretación
sobre lo que constituye el ejercicio de derechos, de allí se desprenden acciones éticas e
idóneas o, por el contrario, prejuiciosas o arbitrarias.