Este trabajo de grado parte del conflicto que se genera entre una manera de comprender el lenguaje desde el habla y otra manera de comprenderlo desde la escritura. La primera, siguiendo cierta tradición filosófica que pensadores como Derrida han denominado como una metafísica logocéntrica (en la que se encuentran desde Platón hasta Jürgen Habermas), ve en el habla la construcción transparente y sin mediaciones de los significados de las cosas. La segunda, por el contrario, a través de la escritura advierte de cierta opacidad latente en todo significado. Sin embargo, dichos conceptos transgreden las meras nociones del sonido de la palabra hablada y el grafema de la tinta escrita. Son, como se verá a lo largo de la investigación, dos formas de construir el sentido del mundo que chocan entre sí: la comprensión metafísica del habla va a establecer una relación particular con la soberanía sobre la que descansa el derecho positivo, mientras que la opacidad de la escritura lo hará con la política. Dicho vínculo de la escritura con la política partirá, en gran medida, de su exposición a la contingencia del lenguaje, exposición que adquiere plena lucidez en la literatura, eje fundamental de la investigación.