La industria de la confección en el Ecuador ha demostrado una marcada fragmentación en los últimos anos, la oferta esta constituida por dos grandes grupos, por una parte las grandes empresas que ofrecen productos de calidad pero que a su vez utilizan técnicas de producción en serie y manufactura estándar, ofreciendo un buen producto pero no de la total satisfacción para el cliente; en tanto que, en contraposición se encuentran los artesanos, personas que con un limitado capital de trabajo y gran habilidad brindan este servicio, con una confección hecha a la medida, puesto que su objetivo es una atención personalizada, mas no en gran volumen, debido a que su capacidad no le permite, el problema de este sector es que se ha visto afectado por una serie de inconvenientes en el servicio, creando una imagen negativa en el consumidor.