| dc.description.abstract | Una mirada escrutadora sobre el mundo que nos ha tocado vivir basta
y sobra para anunciar los retos que todo planteamiento ético posee, por
cuanto le va de suyo que toda propuesta moral busca o procura proveer al
agente de unos mínimos, como el respeto a la ley, la libertad de comunicar,
de ser informado, la convivencia; y de unos máximos como la felicidad y
el bien supremo, entre otros. Y es que un mundo tan convulsionado en
lo político, como enrumbado a defender, en lo económico, patrones de
consumo cada vez más elevados e insostenibles por encima de aquellos
valores sustancialmente importantes para el desarrollo de la identidad
personal y de la participación democrática cual ciudadanos, muestra que
la tarea de aquellos que se sienten comprometidos con la presentación,
defensa e inculcación de valores éticos con programas de formación
llevados a las comunidades educativas, a los medios de comunicación
como la radio, la prensa, la televisión y la Internet, como también a la
sociedad en general, resulta, por decir lo menos, un tanto quijotesco. | es_ES |
