A mediados del siglo XX, el mundo árabe entró en una serie de luchas independentistas y anticolonialistas contra los imperios europeos instaurados a finales del siglo XIX. Específicamente Egipto, bajo los principios de autonomía y unidad nacional consagrados en el programa político propuesto por el Coronel Gamal Abdel Nasser (1918-1970), logró la independencia nacional del imperio británico en 1952. Ya estando en el poder, Nasser forjó un proyecto nacionalista a partir de tres pilares: el panarabismo como principio de identidad nacional, la modernización de Egipto por la vía democrática y el socialismo para llevar a cabo las reformas económicas y sociales. Estos tres pilares constituyeron la espina dorsal de los Seis Principios propuestos en su Filosofía de la Revolución.