dc.description.abstract | Desde la Industrialización y la post-industrialización, el estudio de las necesidades humanas adquirió gran relevancia, los principales criterios eran la productividad y la idea de acumulación de bienes, explicando el bienestar del individuo (Llobet, Mateu, & Ávila, 2012).
Dentro del bienestar del individuo se incluyen diferentes necesidades básicas, estas, han venido demandando la extracción de recursos naturales, los cuales con el pasar de los años se han deteriorado cada vez más, ya que se requiere suplir las necesidades de la población, cuyo crecimiento no cesa.
Con el fin de confluir en mejores prácticas y mitigar el impacto ambiental que surge a partir del consumo de ropa, es pertinente crear una estrategia que vaya más allá de lo que es el reciclaje, haciendo participe al consumidor como parte importante de la cadena.
Dentro de la ciudad de Bogotá, la producción per-cápita al día de residuos es de 0,94 Kg (Consorcio NCU- UAESP, 2018), siendo un 4,54% dedicado a la producción de residuo textil, residuo que llega al relleno sanitario Doña Juana, cuya capacidad se está viendo cada vez más reducida.
En este estudio, se realizó un diagnóstico relacionado con el consumo de ropa y su tendencia en el momento de convertir ésta en residuo, posteriormente fueron identificados algunos de los actores que trabajan a nivel local y que de una u otra manera pretenden prolongar el ciclo de vida del textil.
Además, se lograron identificar los diferentes puntos críticos que se crean dentro de la cadena posconsumo, motivo por el cual esta investigación, se enfoca en el diseño de un modelo que permite fortalecer lo realizado a nivel local desde el posconsumo, planteando estrategias que resuelvan los puntos críticos encontrados, desde una visión que va más allá del reciclaje, enfocadas hacia lo que se denomina economía circular. | spa |