A partir de la construcción de una imagen fotográfica que fue exhibida en el 2003 en el marco de la entrega del Informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (agosto de 2003), como icónica del conflicto armado interno vivido en el Perú entre 1980 y el 2000, presento una reflexión sobre los usos y abusos a los que a través de su imagen, es sometido un sobreviviente de una masacre ocurrida en abril de 1983, y cuyo cuerpo finalmente se convierte en un campo de batalla de memorias de los distintos actores involucrados en el conflicto armado interno.