Las entidades sin ánimo de lucro en Colombia, también conocidas como ESAL, no buscan repartir utilidades entre sus socios, pues se dedican única y exclusivamente al desarrollo del objeto social; sin embargo, los retos que estas deben enfrentar, como en el año 2016 con lo establecido en el Decreto 2150 del 2017, impulsó un reporte ante la DIAN, el cual incluía, entre otros factores, el reporte de información de miembros y fundadores de sus órganos de dirección, estados financieros, identificación de los donantes, especificando monto, condiciones, declaración de renta, así como el reporte anualizado que describa los proyectos ejecutados o en curso. La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales - DIAN verificó que solo 58,8 % (26 904) diligenciaron los documentos necesarios para normalizar su situación, es por ello que les imprimen la necesidad de autoevaluarse para determinar hasta que nivel pueden ser autosostenibles y tener vocación de permanencia jurídico-económica en el tiempo. Precisamente en este punto resulta indispensable implementar estrategias metodológicas que les permitan identificar y evaluar los factores críticos de éxito, desde su misión y su visión, una planificación estratégica mediante el análisis del FODA y la matriz FODA. De tal manera, se puede decir que el Balance Scorecard - BSC es una herramienta perfectamente viable que le permitirá a las ESAL hacer un control y seguimientos de los indicadores financieros, clientes, procesos internos y de crecimiento aprendizaje, hasta desarrollar y plantear unos objetivos estratégicos que posibiliten conseguir una permanencia y éxito en el tiempo, además de seguir prestando la noble labor del servicio social.