Desde el año 2001 el sector privado y los distintos entes gubernamentales han venido uniendo esfuerzos con el fin de convertir a Bogotá y Cundinamarca en la región más integrada de Colombia en los aspectos institucional, territorial y económico, con una base productiva diversificada, pero focalizada en servicios especializados y agroindustria, articulada al mercado mundial, para ser una de las cinco primeras regiones de América Para el logro de estas metas es necesario generar escenarios que permitan un desarrollo equitativo y sostenible de la región. Evitando la disminución de los suelos agrícolas y la difusión de la población en el territorio, descentralizando el empleo y mejorando, aprovechando y potencializando la infraestructura regional. Partiendo de estos lineamientos y tomando en cuenta la importancia que tiene la Sabana de Occidente, por su proximidad con Bogotá, para el crecimiento de la región, se propone un modelo de ocupación territorial para el Eje Occidental/Calle 13, proyectado para el año 2050.