Entender de donde proviene cada uno de los productos cotidianos que manipulamos día a día y seguir su ruta después que los desechamos, nos ayuda a entender de qué manera actúa el mundo en el presente.
Es evidente que el desarrollo económico de la sociedad ha llevado a un desarrollo lineal de las ciudades donde sus campos de avance ambientales, sociales y tecnológicos se han visto perdidos y olvidados. Al momento de analizar la ciudad como un sistema vivo, complejo y adaptativo, se pueden realizar diversas acciones e intervenir el territorio de la mejor manera.
De este modo se debe realizar un análisis complejo de la ciudad e intervenir cada uno de los sistemas que la componen mediante métodos sistémicos como lo es el de las franjas articuladoras, y llevar a cabo el estudio en un territorio en concreto como la ciudad de Bogotá.