Durante cinco años la multinacional Chiquita Brands guardó relaciones con uno de los grupos insurgentes más violentos del Mundo- Las Autodefensas Unidas de Colombia-, como resultado de este vínculo la empresa contribuyó con tres mil fusiles AK47 y más de tres millones de cartuchos al Conflicto Armado Colombiano. EL caso de esta bananera integra interesantes elementos que reflejan el marco operacional de las empresas en el contexto colombiano. Por esa razón, el presente documento investiga, bajo una perspectiva de RSE, el impacto que produjo esta multinacional en el Desarrollo Humano de la Región durante los años en que financió a los Paramilitares.