Este trabajo clarifica la forma en que debiésemos entender la relación entre funciones ejecutivas y la habilidad de mentalización. Las funciones ejecutivas son definidas como un grupo de habilidades que permiten la generación de respuestas adaptativas a las exigencias medioambientales. Por otro lado, la capacidad de mentalización refiere a la forma en que los humanos son capaces de discernir los estados mentales, intenciones y creencias de otros a través de la conducta observada. Tras revisar algunos de los aspectos más fundamentales de los conceptos en cuestión, se propone que la mentalización fundamenta, organiza y potencia el desarrollo de las funciones ejecutivas, esto, en oposición a la tesis dominante de Carlson et al. (2002), que indica que las funciones ejecutivas son las que fundamentan el desarrollo de la habilidad de mentalización. Luego de revisar la actual evidencia empírica que apoyaría nuestra alternativa, la última sección explora algunas de las áreas que nuestra propuesta podría informar en términos conceptuales y empíricos.